Descubre cómo los niveles de glucosa afectan el rendimiento académico y qué hacer para optimizar el aprendizaje escolar de tu hijo o hija
La diabetes tipo 1 (dt1) es una condición crónica que no solo afecta la salud física, sino también puede influir en el desarrollo escolar y la concentración de los niños en edad escolar. Comprender estos efectos y saber cómo contrarrestarlos es clave para favorecer una experiencia académica positiva y equilibrada. Hoy te contamos todo lo que la ciencia sabe sobre diabetes tipo 1 y concentración escolar.
¿Por qué la diabetes tipo 1 afecta la concentración en los niños?
La respuesta a esta pregunta es compleja, la ciencia nos ofrece pistas claras sobre esta relación y, más importante aún, herramientas para optimizar el rendimiento académico de nuestros pequeños.
La investigación científica ha demostrado que la diabetes tipo 1 puede afectar al funcionamiento cognitivo, especialmente cuando existe un control metabólico deficiente. El déficit total de insulina que provoca la dt1 se traduce en fluctuaciones en los niveles de glucosa en sangre. Las hiperglucemias (niveles altos) y las hipoglucemias (niveles bajos) pueden influir directamente en la función cerebral.
Recientemente, investigadores de la Universidad de Stanford usaron resonancia magnética funcional en niños con dt1 para analizar posibles alteraciones en la función cerebral. La investigación reveló patrones diferentes de actividad cerebral y demostró que exposiciones prolongadas a cambios en los niveles de glucosa, obligan a ciertas regiones cerebrales a trabajar más duro para mantener el enfoque.
La capacidad de concentración puede disminuir en situaciones de hipoglucemia, cuando los niveles de glucosa caen por debajo de 70 mg/dL. Durante estos episodios, el cerebro no recibe la energía necesaria para funcionar óptimamente, provocando:
- Dificultad para mantener la atención.
- Procesamiento lento de información.
- Problemas de memoria a corto plazo.
- Confusión y desorientación.
Sin embargo, los niveles elevados de glucosa de las hiperglucemias también comprometen el rendimiento cognitivo, causando:
- Fatiga mental.
- Irritabilidad.
- Dificultad para enfocar tareas.
- Reducción en la velocidad de respuesta.
Además, los múltiples controles diarios, inyecciones de insulina y el miedo a las hipoglucemias pueden aumentar el estrés y la ansiedad, afectando la interacción social y la participación en actividades escolares. El entorno escolar, en muchos casos, no está lo suficientemente adaptado para brindar el apoyo necesario, lo que puede aislar al niño y dificultar su integración.
Cómo prevenir y contrarrestar el impacto de la diabetes tipo 1 en la concentració
Un control adecuado de la glucosa y una buena coordinación entre familia, escuela y equipo médico son fundamentales para prevenir y mitigar estos efectos. La educación diabetológica y la creación de rutinas estables contribuyen a la confianza y autonomía de los niños. El control regular de la glucemia y una dieta equilibrada, sumados a la actividad física, son pilares del control metabólico, que minimizan las complicaciones en la concentración.
Consejos para los niños y niñas
- Trata de mantener horarios fijos de comidas, controles y actividad física. Son hábitos que te ayudarán a sentirte mejor y a concentrarte en clase.
- Aprende a reconocer los síntomas de hipoglucemia o hiperglucemia y pedir ayuda a los adultos cuando sea necesario. No ignores sensaciones extrañas durante clase.
- Participa en actividades extraescolares y busca apoyo en los profesores ante cualquier dificultad.
Consejos para padres y madres
- Colabora con la escuela para que conozcan la condición del niño y cómo actuar en casos de emergencia.
- Supervisa el control glucémico y la aplicación del tratamiento según lo recomendado. Revisa los niveles de glucosa antes y después de la escuela.
- Evalúa tecnologías como bombas de insulina o dispositivos de medición continua de glucosa para mantener niveles estables.
- Propicia un ambiente positivo, evitando la sobreprotección excesiva y promoviendo la autonomía del niño.
- Consulta regularmente con el equipo médico y educadores expertos en diabetes para adaptar el plan de manejo.
- Busca grupos de apoyo, como las asociaciones de pacientes, para familias con dt1.
Un futuro brillante es posible
La diabetes tipo 1 puede influir en la concentración de los niños y niñas en edad escolar debido a las variaciones en los niveles de glucosa que afectan el funcionamiento del cerebro. Sin embargo, esta realidad no determina su futuro. Con un buen control glucémico, hábitos de vida saludables y un acompañamiento constante por parte de la familia, el colegio y el equipo médico, es posible minimizar este impacto y potenciar su rendimiento académico y bienestar emocional. Con las herramientas adecuadas, los niños y niñas con diabetes tipo 1 pueden desarrollar todo su potencial y alcanzar el mismo éxito educativo que sus compañeros.
Este artículo se basa en evidencia científica actual y está destinado únicamente para fines informativos. Consulte siempre con profesionales de la salud calificados para decisiones médicas específicas.
Si quieres saber más, te dejamos aquí algunos enlaces donde puedes leer estudios sobre el tema:
- Plos One (2019). Executive task-based brain function in children with type 1 diabetes: An observational study (https://doi.org/10.1371/journal.pmed.1002979).
- Revista Diabetes (2024). Claves para el manejo eficaz de la diabetes en el entorno escolar (https://www.revistadiabetes.org/miscelanea/claves-para-el-manejo-eficaz-de-la-diabetes-en-el-entorno-escolar/).